Mi lista de blogs

domingo, 4 de enero de 2009

CARTA V

Estimado Odiseo,

Tengo ya puesto un pie en esta solitaria orilla…

Y después de soñar los ritos extraños de campanas huecas y frutos de viña, me encuentro solo, esperando el mañana y el después.

Y noto el miedo a lo desconocido a mi alrededor. Porque no son tiempos buenos.

Encontré a un viejo que caminaba hacia la lejanía. Mas, al preguntarle su destino me dijo que era el pasado. Me invitó a pedir a lejanos reyes mi futuro. Y yo quise creer.

El anciano había envejecido con el año y me dijo, que el futuro era incierto, para todos.

La congoja me llevó al error, al de siempre, al no sentir el presente sino imaginar el mañana, tan lejano, tan inquieto, tan impredecible.

El viejo me avisó del nuevo año, y me contó extrañas palabras donde la inquietud estaba presente. Me dijo que los nuevos tiempos ya no hacían soñar, y que el miedo de los habitantes cercanos le hacían rezar a lo desconocido por miedo. Miedo, a seguir viviendo.

Extrañas mantícoras carmesíes que nos deniegan el paso a la felicidad.

Pero, ¿podemos hacer nosotros algo?

Muchas veces las respuestas se encuentran en la sonrisa de los niños y en sus palabras.

NADIE.